Las obras de la variante de Benissa empiezan de cero. El Ministerio de Fomento ha sacado ahora a exposición pública el proyecto para acabar los trabajos que quedaron empantanados en 2009., cuando la adjudicataria Begar, Construcciones y Contratas, SL, entró en concurso de acreedores. La empresa se había quedado el proyecto por 17 millones de euros. ahora se dispara a 27 millones. Los movimientos de tierra que llegaron a realizarse no sirven ya de mucho. Además, el Ministerio ha detectado un error en la cartografía que le ha obligado a variar ligeramente el trazado de la variante y las ocupaciones de terrenos.
Unos 230 propietarios se verán afectados por las nuevas expropiaciones, que suman 103.738 metros cuadrados. El ministerio eleva a 2,2 millones el pago de las compensaciones, 1,8 millones corresponden a la ampliación de la expropiación( a unos 180 propietarios les cogen más terreno), otros 171.390 euros a la expropiación de nuevas parcelas y 138.500 euros a indemnizar por la demolición de cinco edificaciones que quedan en medio de la futura variante.
Esta carretera de circunvalación, que permitirá eliminar la actual travesía urbana de la N-332 en Benissa, figuraba en los presupuestos del Estado para el actual año, aunque la partida era de cero euros. Las obras debían financiarse por el método alemán, para lo que en 2018 el Gobierno consignará esos 27 millones.
La nueva variante incorpora más cambios además del trazado. Se ajustan las rasantes, se mejora el diseño de las glorietas (la primera desde el acceso de Calp se suprime y se apuntalan los taludes con muros de escollera. También se rediseña la red de drenajes. Los puentes, se refuezan por el riesgo sísmico.
El proyecto incide en que se ha detectado la existencia de un nuevo gaseoducto, cuyo trazado interfiere en la variante. Todavía no hace un año que se acabó esta tubería de gas, tramo entre Xábia y Calp, y nadie se dio cuenta de que serpenteaba bajo el trazado de la carretera. Ahora las zonas de cruce se deben reforzar.
Ref: Levante 06.03.15