Los colegios religiosos recuperan el terreno perdido en el PGOU de 1988
El ayuntamiento permitirá uso terciario y residencial comunitario a 30 centros privados para compensarles por la pérdida de edificabilidad
La revisión del Plan general de 1988 que hoy pasará por la comisión de Urbanismo permitirá a 30 colegios religiosos volver a la situación de 1988 que los grafió como equipamiento público escolar ocasionándoles importantes pérdidas patrimoniales. Diez colegios recurrieron la calificación como equipamiento educativo público que el ayuntamiento les asignó en el PGOU de 1988.
Los jueces entendieron que el ayuntamiento estaba legitimado para calificar como escolares las parcelas de los colegios religiosos si bien debía indemnizar económicamente por la pérdida e aprovechamiento urbanístico y la limitación de usos. Ha tenido que pagar 30 millones de euros a los colegios que pleitearon. Se garantiza la vinculación de las parcelas de los colegios religiosos al uso escolar durante 30 años.
El colegio Maristas fue de los que denunció al ayuntamiento por la pérdida de aprovechamiento lucrativo y que, ha cobrado una indemnización. Algunos colegios solicitaron en las alegaciones mecanismos compensatorios por la restricción del aprovechamiento urbanístico. Tampoco se ha aceptado la reclamación de algunos colegios que querían aprovechar la revisión del planeamiento para recalificar parte de sus terrenos. Los técnicos recuerdan a los colegios que la edificabilidad de sus parcelas es la propia de una dotación educativa un metro cuadrado de techo por metro cuadrado de suelo.
Ref.: Levante 18.12.2014